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La lección La vestimenta de la mujer musulmana
La vestimenta es una gracia inmensa que Al-lah otorgó a la gente. Con la vestimenta el ser humano protege su cuerpo y se protege del calor, del frío, etc., y también aporta elegancia y buena apariencia. Al-lah dijo: {¡Oh, hijos de Adán! Los he provisto con vestimentas para que cubran sus vergüenzas y para que se vistan con elegancia. Pero vestirse con la piedad es la mejor [vestimenta]. Eso es un signo de Al-lah para que puedan recapacitar} [Corán 7:26]. Algunos tipos de vestimenta son necesidad urgente para todo hombre o mujer, se trata de la que cubre. Otro tipo de vestimenta son para mejorar la apariencia y engalanarse para un matrimonio o el 'Eid, por ejemplo.
Los preceptos religiosos relacionados con la vestimenta de la mujer cumplen objetivos importantes. Desde el punto de vista de la mujer, le dan una apariencia exclusiva, es una protección de las miradas de los hombres y la protege, en general, de palabras y actos de gente pervertida. La vestimenta femenina dota a la mujer de cierta tranquilidad y sosiego, dignidad y porte. Antes que nada, al aplicar los preceptos religiosos respecto a la vestimenta, la mujer declara su adoración a Al-lah y su devoción al obedecer Sus mandatos y evitar incurrir en Sus prohibiciones. Con esto se hace merecedora de la complacencia, las bendiciones y la gracia divina.
En cuanto al plano social, la vestimenta legal de la mujer o el hiyab es una protección para toda la sociedad de la hipersexualización de las relaciones, y ayuda a mantener la estabilidad y el sosiego en sus miembros. Cuando la hipersexualización (fitna) azota una sociedad, afecta a todos sus miembros, hombres y mujeres, amenaza la estabilidad de la estructura familiar y puede llegar a destruirla. Esto se ha visto en muchas comunidades.
Requisitos para un hiyab válido
1. Cubrir el cuerpo.
Al-lah dijo: {¡Oh, Profeta! Diles a tus mujeres, a tus hijas y a las mujeres de los creyentes, que se cubran con sus mantos; es mejor para que se las reconozca y no sean molestadas. Al-lah es Perdonador, Misericordioso} [Corán 33:59]. Hay disenso entre los juristas respecto a cubrir la cara y las manos; unos dicen que es obligatorio y otros, que es recomendable, aunque están de acuerdo respecto al resto del cuerpo.
2. Que no sea provocador.
Esto está incluido en la generalidad de la aleya: {Que no expongan sus encantos} [Corán 24:31].
3. y 4. Que sea de un tejido grueso y amplio.
Dijo el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él: "Hay dos tipos de habitantes del Infierno a los que aún no he visto. Gentes portando azotes como las colas de las vacas con los que golpean a la gente, y mujeres vestidas y desnudas a la vez, desviadas y desviadoras, sus cabezas se parecen a las jorobas mechudas de los camellos. Estos dos grupos no entrarán al Paraíso ni sentirán su aroma, a pesar de que su aroma se siente de tal y tal distancia" (Muslim, 2128). Usama Bin Zaid, que Al-lah esté complacido con él, dijo: "El Mensajero de Al-lah, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, me dio una tupida capa modelo egipcio, que era de lo que le había regalado Dahía Al Kalbi. Yo se la di a mi esposa. El Mensajero de Al-lah me dijo: "¿Por qué no te pusiste la capa copta?", y yo le dije: "Se la di a mi mujer"; y él me dijo: "Dile que le ponga un forro por debajo, pues temo que deje traslucir su figura".
5. Que no esté perfumada.
El Mensajero de Al-lah, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: "Si una mujer se perfuma y pasa entre la gente para que sientan su perfume, es una adúltera".
6. Que no imite la ropa masculina.
Ibn 'Abbás, que Al-lah esté complacido con él, dijo: "El Mensajero de Al-lah maldijo a los hombres que imitan a las mujeres y a las mujeres que imitan a los hombres" (Bujari, 5885).
7. Que no imite las ropas de las mujeres incrédulas.
La ley islámica afirma que los musulmanes, ni hombres ni mujeres, no deben imitar a los incrédulos en sus rituales, en sus festejos o sus ropas exclusivas, pues el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: "Quien imita a una gente es parte de ellos" (Abu Dawud, 4031).
8. Que no sea ropa ostentosa.
El Mensajero de Al-lah, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: "A quien viste ropas ostentosas en esta vida, Al-lah lo vestirá con ropas humillantes en el Día de la Resurrección y luego se le prenderá fuego" (Ibn Maya 3607). La ropa ostentosa es la que se usa para hacerse conocido y destacar entre la gente.
Los requisitos anteriores se limitan a lo que la musulmana debe vestir al salir a la calle o cuando está en presencia de hombres ajenos. La mujer no está obligada a vestir así cuando está frente a su familia o cuando se encuentra con otras mujeres; en estos casos podrá perfumarse y exhibir algo de sus galas con ciertos parámetros.
El tabarruy
Consiste en que la mujer exponga frente a hombres ajenos sus encantos y su belleza que debería estar cubierta de sus miradas.
La vestimenta de la mujer musulmana según quien la rodea
La vestimenta frente al hombre ajeno
Debe vestir el hiyab legal que Al-lah y Su Mensajero, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, mandaron, del que ya mencionamos sus condiciones.
La vestimenta ante sus familiares varones [en primer grado]
Debe cubrir frente a ellos todo su cuerpo, excepto lo que normalmente queda expuesto, como el cabello, el cuello y los pies, además de la cara y las manos. Al-lah dijo: {Dile a las creyentes que recaten sus miradas, se abstengan de cometer obscenidades, no muestren de sus atractivos [en público] más de lo que es obvio, y que dejen caer el velo sobre su escote, solo muestren sus encantos a sus maridos, sus padres, sus suegros, sus hijos, los hijos de sus maridos, sus hermanos, sus sobrinos por parte de su hermano y de su hermana...} [Corán 24:31].
La vestimenta frente a otras musulmanas
Debe cubrirse frente a ellas ̶ como en el caso de sus familiares ̶ todo su cuerpo, excepto lo que normalmente queda expuesto, como el cabello, el cuello y los pies, además de la cara y las manos. Al-lah dijo: {Diles a las creyentes que recaten sus miradas, se abstengan de cometer obscenidades, no muestren de sus atractivos [en público] más de lo que es obvio, y que dejen caer el velo sobre su escote, solo muestren sus encantos a sus maridos, sus padres, sus suegros, sus hijos, los hijos de sus maridos, sus hermanos, sus sobrinos por parte de su hermano y de su hermana, las mujeres...} [Corán 24:31]. Aquí al final hace una referencia a las mujeres creyentes.
La vestimenta ante las mujeres de religiones celestiales
Debe cubrirse frente a ellas ̶ como en el caso de las mujeres musulmanas ̶ todo su cuerpo, excepto lo que normalmente queda expuesto, como el cabello, el cuello y los pies, además de la cara y las manos. La prueba de esto es que las mujeres de religiones reveladas solían visitar a las "madres de los creyentes" y no se ha registrado que el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, les haya ordenado guardar el hiyab frente a ellas.
Tipos de vestimenta de la mujer y sus encantos visibles desde el punto de vista de la permisión y la prohibición
Ropas y adornos permitidos
La ropa y las galas son en principio permitidas y la única excepción es lo que se ha prohibido en la Shari'a. La mujer puede vestir toda clase de ropas, de todos colores y telas, y puede engalanarse con cualquier clase de adorno permitida como joyas, perfumes y medios de embellecimiento, a condición de que no causen daño, que no haya imitación a las mujeres incrédulas y que no contengan sustancias prohibidas, como grasa de cerdo, por ejemplo.
Ropas y adornos recomendados
Se refiere a todo lo que se recomienda en la Shari'a, la ropa que viste la mujer y los adornos que usa para complacer a su esposo o para que la quiera más, siempre que no sea algo prohibido.
Ropas y adornos prohibidos
Se refiere a todo lo que la Shari'a prohíbe sobre la vestimenta y accesorios de belleza; sea que haya sido prohibido textualmente o contradiga las normas que debemos seguir, como no imitar a judíos y cristianos o no imitar a los hombres.
